Las 15 ciudades más bonitas de Portugal
Si llegaste hasta aquí buscando recomendaciones sobre qué ciudades de Portugal visitar, es probable que ya estés familiarizado con los encantos, la historia y la asombrosa arquitectura que ofrecen Lisboa y Porto, las dos ciudades principales. No obstante, ¿qué ocurre con el resto del país?
Durante nuestra estadía en Portugal hemos podido conocer casi todas las ciudades que te recomendaremos más abajo. De las que aún no hemos tenido la oportunidad de visitar, hemos tomado opiniones de amigos y conocidos que ya han podido conocerlas y disfrutarlas.
Explora la verdadera esencia del país luso al inspirarte con las 15 ciudades más auténticas y hermosas de Portugal.
1. Lisboa
Lisboa es reconocida como una de las ciudades más hermosas de Europa, y cómo no, si está situada entre 7 colinas, el río Tejo y está adornada por sus estrechas callecitas, empinadas y coloridas.
Explorar el pintoresco barrio de Alfama es imprescindible, donde tranvías amarillos y azulejos llenan los rincones de color, ofreciendo también vistas espectaculares desde el mirador de Santa Lucía o el Largo dos Portas do Sol.
Con un ambiente alternativo, moderno y vibrante, Lisboa se destaca como una de las principales ciudades europeas para los nómadas digitales, quiénes son atraídos por su excelente clima y seguridad.
No se puede dejar de visitar el barrio de Belém, donde se pueden degustar los famosos pasteles de nata y explorar monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad, como la Torre de Belém y el Monasterio de los Jerónimos.
Si estás planeando una visita a Lisboa, descubre nuestra guía de «3 días en Lisboa» para conocer lo mejor de esta fascinante ciudad.
2. Porto
Oporto, situada al norte de Portugal a orillas del río Duero, es una ciudad que cautiva a los visitantes con su atmósfera única y su rica historia. Conocida por su vino de Oporto y su impresionante arquitectura, esta ciudad ofrece una mezcla perfecta de tradición y modernidad.
El casco antiguo de Oporto, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está repleto de estrechas calles empedradas, coloridos edificios y encantadoras plazas que invitan a perderse y explorar cada rincón.
Los emblemáticos azulejos portugueses adornan muchas de sus fachadas, agregando un toque de belleza y autenticidad a la ciudad.
Uno de los mayores atractivos de Porto es el río Duero, bordeado por las famosas bodegas de vino de Oporto. Un paseo en barco por el río ofrece vistas impresionantes de los viñedos en terrazas que se extienden por las colinas.
La catedral de Oporto, de estilo románico, es otro punto destacado. Situada en lo alto de una colina, ofrece vistas panorámicas espectaculares de la ciudad y el río Duero. Los amantes del arte también disfrutarán explorando los numerosos museos de la ciudad, como el Museo de Arte Contemporáneo y el Museo Nacional Soares dos Reis.
Además de su patrimonio cultural, Oporto también es conocida por su deliciosa gastronomía, que incluye un plato local emblemático: la francesinha. Este sándwich abundante y reconfortante está lleno de capas de carne, embutidos, queso y jamón, todo cubierto con una salsa y servido con papas fritas.
3. Sintra
Sintra, una joya escondida en las colinas boscosas de Portugal, es un destino que parece sacado de un cuento de hadas. Con su encantador casco antiguo, palacios y cuidados jardines, Sintra es una escapada mágica a tan solo 30 minutos de Lisboa.
El Palacio Nacional de Sintra, con sus características chimeneas cónicas, es un punto de partida en el centro histórico de la ciudad. Subir hasta el Palacio da Pena es como adentrarse en un mundo de fantasía, con sus torres de colores vivos y vistas panorámicas impresionantes que se extienden hasta el océano Atlántico.
Los jardines del Palacio de Monserrate, con su exótica vegetación y arquitectura romántica, son el lugar perfecto para perderse y disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza. Además, el Palacio de Quinta da Regaleira, con sus misteriosos túneles y simbología esotérica, ofrece una experiencia única que fascina a todos los visitantes.
Sintra es un lugar que no te puedes perder si visitas Lisboa.
4. Coimbra
Coimbra, es una ciudad histórica en el corazón de Portugal. Es conocida por ser la sede de una de las universidades más antiguas de Europa, la Universidad de Coimbra.
El imponente campus universitario, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, domina la ciudad desde lo alto de una colina y ofrece vistas impresionantes del río Mondego. Los visitantes pueden explorar los interesantes edificios históricos, como la Biblioteca Joanina con sus exquisitos detalles barrocos, y el Jardin Botánico, donde disfrutamos un tranquilo paseo con Maqui.
Andar por las estrechas calles empedradas del casco antiguo es como viajar en el tiempo, con sus antiguas iglesias, plazas y cafeterías. La Sé Velha, una catedral románica del siglo XII, y el Monasterio de Santa Cruz son solo algunos de los lugares de interés que capturan la esencia histórica de Coimbra.
Otro de los puntos destacados de Coimbra es el río Mondego, que serpentea a través de la ciudad y ofrece un escenario perfecto para pasear y relajarse. Su ribera invita a los visitantes a disfrutar de tranquilos paseos junto al agua, donde se pueden admirar las impresionantes vistas de los antiguos puentes que cruzan el río y los hermosos paisajes naturales que lo rodean.
Qué ver en Coimbra: Guía Completa de la Ciudad Universitaria de Portugal
5. Cascais
Cascais, una encantadora ciudad costera ubicada a pocos kilómetros de Lisboa, es un destino que destaca por su combinación de playas, pintorescas calles empedradas y un ambiente cosmopolita.
Conocida como la «Riviera portuguesa«, Cascais ofrece un escape desde la bulliciosa capital hacia un entorno tranquilo.
Sus playas, como la Praia do Guincho y la Praia da Rainha, atraen a los amantes del sol de todo el mundo, los cuales también pueden explorar el casco antiguo de Cascais, con sus estrechas callejuelas llenas de tiendas boutique, restaurantes y bares con terrazas con vistas al mar.
El muelle de Cascais es otro punto a visitar, donde los yates de lujo se mecen suavemente junto a los barcos turísticos que te pueden llevar a dar un paseo por el rio Tajo. En este muelle, se puede disfrutar de distintos tipos de restaurantes frente al mar.
6. Aveiro
Aveiro, ubicada en la costa central de Portugal, es una encantadora ciudad conocida como la «Venecia portuguesa» debido a sus pintorescos canales y coloridos botes moliceiros. Situada a unos 70 kilómetros al sur de Oporto, esta ciudad costera combina la belleza natural de sus humedales con la arquitectura histórica y una animada vida cultural.
Los principales atractivos de Aveiro incluyen sus encantadores canales, donde se puede dar un paseo en bote moliceiro para explorar la ciudad desde una perspectiva única. Los edificios de colores brillantes a lo largo de los canales, junto con los puentes históricos que los atraviesan, crean una atmósfera pintoresca y encantadora.
Además de sus canales, Aveiro es famosa por sus playas de arena dorada, como la playa de Costa Nova, conocida por sus casas rayadas de colores brillantes. Los visitantes también pueden disfrutar de la arquitectura Art Nouveau en el centro de la ciudad, así como de la deliciosa gastronomía local, que incluye platos de pescado fresco y mariscos.
La mejor época para visitar Aveiro es durante la primavera y el verano, cuando el clima es cálido y soleado, perfecto para explorar los canales en barco o relajarse en las playas cercanas. Durante estos meses, la ciudad cobra vida con festivales y eventos culturales, lo que la convierte en un destino aún más atractivo para los viajeros que buscan una experiencia única en Portugal.
7. Braga
Braga, situada en el noroeste de Portugal, es una ciudad llena de historia y encanto. Conocida como la «Roma portuguesa» debido a su rica herencia religiosa y numerosas iglesias barrocas, Braga es un destino fascinante para los viajeros que desean sumergirse en la cultura y la arquitectura de Portugal.
Los principales atractivos de Braga incluyen su imponente Catedral, una obra maestra de la arquitectura barroca que data del siglo XII. Los visitantes también pueden explorar el Santuario del Bom Jesus do Monte, un impresionante complejo religioso situado en lo alto de una colina, accesible a través de una escalera monumental o un funicular.
Además de su patrimonio religioso, Braga cuenta con encantadoras plazas, calles empedradas y parques tranquilos que invitan a pasear y disfrutar de la atmósfera relajada de la ciudad. El Jardín de Santa Bárbara y el Parque da Ponte son lugares populares para relajarse y disfrutar de la naturaleza.
La mejor época para visitar Braga es durante la primavera y el verano, cuando el clima es cálido, ideal para explorar los lugares históricos al aire libre y disfrutar de los festivales y eventos culturales que se celebran en la ciudad. Durante estas estaciones, Braga cobra vida con celebraciones religiosas, fiestas populares y conciertos al aire libre.
8. Tavira
Tavira, situada en la región del Algarve en el sur de Portugal, es una joya costera que cautiva con su encanto histórico y sus hermosas playas. Ubicada a orillas del río Gilão y cerca del Parque Natural de la Ría Formosa, esta ciudad ofrece una combinación de historia, naturaleza y cultura.
Sus principales atractivos incluyen el encantador casco antiguo, donde se puede pasear por estrechas calles empedradas y admirar la arquitectura tradicional portuguesa. La Ponte Romana, un puente romano del siglo XVII, es un punto destacado que ofrece vistas del río y la ciudad.
Tavira también es conocida por sus hermosas playas de arena dorada y aguas cristalinas. La isla de Tavira, accesible en ferry, es un paraíso costero con kilómetros de playas vírgenes y un ambiente tranquilo y relajante.
La mejor época para visitar Tavira es durante la primavera y el verano, perfecto para disfrutar de las playas y explorar la ciudad. Durante estos meses, también se celebran varios festivales y eventos culturales, lo que añade un toque extra de vida y color a la experiencia de viaje en Tavira.
9. Nazaré
Nazaré, una ciudad costera de Portugal, se encuentra en la región central del país, a unos 120 kilómetros al norte de Lisboa. Es conocida por sus impresionantes acantilados, sus playas y su rica historia marinera.
Los principales atractivos de Nazaré incluyen su casco antiguo, donde los visitantes pueden pasear por sus estrechas calles empedradas y descubrir encantadoras tiendas y restaurantes.
La playa de Nazaré es famosa por sus olas gigantes, que atraen a surfistas de todo el mundo, especialmente durante el invierno cuando se pueden encontrar algunas de las olas más grandes del planeta.
Además, el mirador de Suberco ofrece vistas impresionantes de la ciudad y el océano Atlántico desde lo alto de los acantilados.
Otro atractivo destacado de Nazaré es el Santuario de Nossa Senhora da Nazare, un santuario religioso ubicado en la cima de un acantilado con vistas panorámicas de la ciudad y el mar. Los visitantes pueden subir en el funicular para llegar al santuario y disfrutar de las vistas espectaculares.
La mejor época para visitar Nazaré es durante los meses de primavera y verano, cuando el clima es cálido y soleado, ideal para disfrutar de la playa y explorar los alrededores.
Sin embargo, los surfistas pueden preferir visitar durante el invierno para aprovechar las impresionantes olas que caracterizan esta época del año. En cualquier momento del año, Nazaré es un destino imperdible en Portugal.
10. Obidos
Obidos, una ciudad medieval, se encuentra en la región centro de Portugal, a unos 80 kilómetros al norte de Lisboa. Esta ciudad amurallada, con sus calles empedradas y casas blancas adornadas con flores, parece sacada de un cuento de hadas.
Los principales atractivos de Óbidos incluyen su impresionante castillo medieval, que domina la ciudad desde lo alto de una colina, y sus murallas bien conservadas que ofrecen vistas panorámicas de los alrededores.
Perderse en el laberinto de callejuelas estrechas es toda una experiencia, donde cada esquina revela una nueva sorpresa, desde tiendas de artesanía local hasta acogedores cafés y restaurantes.
Además del castillo y las murallas, Óbidos es conocida por su Festival Internacional de Chocolate, que se celebra en marzo, y por su Festival Medieval, que tiene lugar en julio. Estos eventos atraen a visitantes de todo el mundo y ofrecen una oportunidad para sumergirse en la historia y la cultura de la ciudad.
La mejor época para visitar Óbidos es durante la primavera y el otoño, cuando el clima es suave y agradable, perfecto para explorar la ciudad a pie. Durante estos meses, también hay menos turistas, lo que permite una experiencia más tranquila y auténtica en esta ciudad medieval tan especial.
11. Guimaraes
Guimarães, una ciudad con un rico patrimonio histórico y cultural, se encuentra en el norte de Portugal, en la región de Minho. Conocida como la «cuna de Portugal», Guimarães es un destino imprescindible para los amantes de la historia y la arquitectura.
Sus principales atractivos incluyen el impresionante Castillo de Guimarães, una imponente fortaleza medieval que se alza sobre la ciudad y ofrece vistas panorámicas impresionantes. El centro histórico de Guimarães, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, está repleto de calles empedradas, plazas y edificios históricos bien conservados, como el Palacio de los Duques de Braganza y la Iglesia de São Miguel do Castelo.
Los visitantes también pueden explorar el Largo da Oliveira, una plaza central rodeada de edificios históricos y cafeterías al aire libre, donde pueden disfrutar de la atmósfera de la ciudad.
Además, es famosa por su gastronomía, que incluye platos tradicionales como el bacalao y la sopa caldo verde.
La mejor época para visitar Guimarães es durante la primavera y el verano, ideal para explorar sus calles históricas y disfrutar de las numerosas festividades y eventos culturales que tienen lugar en la ciudad.
Sin embargo, Guimarães tiene un encanto especial durante todo el año, con sus colores otoñales y la atmósfera festiva durante la temporada navideña, lo que la convierte en un destino atractivo en cualquier momento del año.
12. Évora
Évora está situada en la región del Alentejo, en el sur de Portugal. Su ubicación estratégica, a unos 130 kilómetros al este de Lisboa, la convierte en un destino accesible para los viajeros que la desean explorar.
Los principales atractivos de Évora incluyen su casco antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, que está lleno de monumentos históricos. Destaca el Templo de Diana, un antiguo templo romano bien conservado, y la Catedral de Évora, una magnífica obra de arquitectura gótica que domina el horizonte de la ciudad.
Además de sus monumentos históricos, Évora es conocida por su atmósfera relajada. Los visitantes pueden pasear por las calles empedradas y disfrutar de la auténtica vida portuguesa en sus plazas y cafeterías.
La ciudad también es famosa por su gastronomía, que incluye platos tradicionales del Alentejo como el cerdo negro y el pan fresco.
La mejor época para visitar Évora es durante la primavera y el otoño, cuando el clima es suave y agradable. Durante estos meses, los campos circundantes están llenos de flores silvestres y la ciudad cobra vida con festivales y eventos culturales.
Sin embargo, Évora también tiene su encanto en invierno, cuando las calles están decoradas con luces navideñas y se puede disfrutar de la tranquilidad de la temporada baja.
13. Funchal
Funchal, la capital de la isla de Madeira, se encuentra en el corazón del Atlántico, en la costa sur de Portugal. Esta ciudad costera es conocida por su clima subtropical, sus jardines y arquitectura.
Entre los atractivos principales de Funchal se encuentra el mercado de Labradores, donde los visitantes pueden disfrutar de una experiencia sensorial única explorando los puestos de frutas frescas, flores exóticas y productos locales. Además, el Jardín Botánico ofrece una amplia variedad de flora endémica de Madeira, así como vistas panorámicas de la ciudad y el mar.
El teleférico de Funchal es otra atracción popular que lleva a los visitantes desde el centro de la ciudad hasta Monte, ofreciendo vistas panorámicas espectaculares a lo largo del camino. Una vez en Monte, se puede disfrutar de un paseo en los tradicionales trineos de mimbre o visitar la iglesia de Nossa Senhora do Monte, un importante lugar de peregrinación.
La mejor época para visitar Funchal es durante la primavera y el verano, ideal para explorar los jardines y disfrutar de actividades al aire libre. Además, durante el mes de febrero, la ciudad acoge el famoso Carnaval de Madeira, una festividad llena de color, música y alegría que atrae a visitantes de todo el mundo.
14. Lagos
Lagos, una ciudad costera del sur de Portugal, se encuentra en la región del Algarve, conocida por sus impresionantes playas y acantilados. Situada a aproximadamente 90 kilómetros al oeste de Faro, esta encantadora ciudad combina historia, cultura y belleza natural en un solo destino.
Sus principales atractivos incluyen sus impresionantes playas, como la famosa Praia Dona Ana y la Praia do Camilo. Los visitantes también pueden explorar la emblemática Ponta da Piedade, un conjunto de acantilados y formaciones rocosas impresionantes que se pueden admirar desde tierra firme o en un paseo en barco por la costa.
Además de sus playas, Lagos cuenta con un encantador centro histórico. Los puntos destacados incluyen la Iglesia de San Antonio y el Mercado de Esclavos, que ofrecen una visión del pasado de la ciudad.
La mejor época para visitar Lagos es durante la primavera y el verano, ideal para disfrutar de las playas y actividades al aire libre. Durante estos meses, la ciudad cobra vida con festivales, eventos culturales y una animada vida nocturna.
15. Faro
Faro, situada en la región del Algarve en el sur de Portugal, y es la capital de la región.
El casco antiguo de Faro está rodeado por murallas del siglo IX y cuenta con calles empedradas, plazas y edificios de arquitectura tradicional portuguesa.
La Catedral de Faro es una visita obligada, al igual que el Museo Municipal y la Capilla de los Huesos, con sus paredes decoradas con cráneos y huesos humanos.
Uno de los mayores atractivos de Faro es su costa. La playa de Faro, situada en la isla de Faro y accesible en ferry, es una de las más populares, ideal para tomar el sol, nadar y disfrutar de actividades acuáticas como el windsurf y el kitesurf.
Además, Faro sirve como puerta de entrada al Parque Natural de Ria Formosa, una reserva natural protegida que alberga una gran diversidad de aves y vida silvestre. Los visitantes pueden explorar este impresionante entorno natural a través de caminatas, paseos en barco y observación de aves.
La mejor época para visitar Faro es durante la primavera y el verano, cuando el clima es cálido y soleado, perfecto para disfrutar de las playas y actividades al aire libre. Sin embargo, Faro también tiene un encanto especial durante el otoño y el invierno, cuando las multitudes disminuyen y se puede disfrutar de un ambiente más tranquilo y relajado.
Cuando planeas explorar Portugal, un país caracterizado por distancias relativamente cortas entre sus ciudades, considerar el arriendo de un auto puede proporcionarte una experiencia de viaje más libre y flexible. Te recomendamos Discover Cars, que tienen una amplia variedad de Autos y con muy buenos precios.